Redacción | Barcelona

Los tiempos han cambiado y la cocina se ha vuelto más creativa que nunca o, al menos, ésa es la apuesta del restaurante madrileño de La Posada del León de Oro, La Enotaberna, que juega con texturas, sabores y temperaturas para incorporar el helado en su cocina del día a día estival. ¿El resultado? Un menú compuesto por un primero, un segundo y un postre en el que el alimento indiscutible del verano tiene un papel protagonista.  

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Salmorejo con helado de parmesano y aceite de albahaca

Un clásico del verano que viene este año con unos aires aún más frescos que nunca. Este plato combina todo lo bueno de la receta original del salmorejo con un toque de parmesano en forma de bola de helado casero. El aroma de la albahaca le aporta un irresistible toque “tocanesco” a la versión tradicional.

Steak Tartar de solomillo de buey cortado a cuchillo con crujiente de pan y helado de mostaza

Existen muchas versiones de la receta de Steak Tartar. En La Posada del León de Oro ponen en práctica el arte del cuchillo para elaborar un plato con texturas inigualables. Un plato que ha sabido guardar en secreto su receta y que solo podrán descubrir quiénes lo prueben. Un helado de mostaza de Dijon se encarga de acompañar y potenciar las delicias de este tartar único.

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 Sopa de chocolate blanco con helado artesano de violetas

Una deliciosa y suave crema de chocolate blanco funde el helado casero de violeta. Este postre recupera uno de los sabores más emblemáticos de la capital, la violeta, para convertirlo en todo un icono del establecimiento. Un bocado con sabor a Madrid que pone el broche de oro a un menú de lo más refrescante.