Las cocinas oscuras, un modelo de negocio con mucho potencial de crecimiento tras la pandemia

¿Cómo está evolucionando las dark kitchens en nuestro país? ¿Cómo son estos modelos de negocio? ¿Cómo trabajan con sus socios o sus partners? Es un tema muy hablado y muy debatido entre los expertos y profesionales del sector. Las cocinas oscuras están siendo toda una revelación ya que ayudan a los establecimientos a seguir funcionando olvidándose del servicio en sala, sirviendo pedidos sólo de manera online: a través del delivery. Durante las jornadas de R-Talks organizadas por AECOC, los socios de CLOUDTOWN han sido los protagonistas en esta ocasión para hablarnos de su modelo de negocio.
Juan Andrés Latuff y Miguel Ron han sabido aprovechar las circunstancias de la pandemia de manera extraordinaria, la situación a la que se ha visto empujada la hostelería ha sido un detonante de su éxito con esta idea. Juan Andrés es co-fundador de Chivuos, una famosa marca de bocadillos premium y cerveza artesanal con tres restaurantes en Barcelona y un cuarto en Valencia. Pero llegó la pandemia y, junto con Miguel aceleraron uno de los proyectos que tenían en mente: Downtown collective. Este «dream team de la comida de calle» da su primer paso con la apertura del espacio LA CITI, en el Centro Comercial La Maquinista de Barcelona, uno de los más grandes y visitados de España. Son 5 partners y 9 socios que en ese momento tan crítico deciden actuar y materializar la idea.
Parte de estos socios crearon Cloudtown Brands que hoy opera con seis cocinas oscuras en Barcelona y alrededores y está en fase de expansión en otras ciudades. Pretenden expandirse a Madrid y Valencia: «Queremos tener 20 localizaciones a final del año que viene por toda la península», dice Juan Andrés. Aunque como objetivo tienen irradiar sus servicios a Portugal y Francia pero son cautelosos.
Cloudtown Brands: trayectoria y simbiosis perfecta
Esta iniciativa nace porque la unión, hace la fuerza. Así hablan Juan Andrés Latuff, CIO de CLOUDTOWN y Miguel Ron, CEO de CLOUDTOWN. Los conoceremos, como también la visión de Miguel y Juan Andrés del momento actual y de las oportunidades futuras. Dos emprendedores de nueva generación que se han convertido en un buen ejemplo de colaboración, reinvención y readaptación en este entorno. Su empresa aglutina diez marcas ahora, marcas creadas y marcas de terceros (marcas como sui fueran franquicias).
El food delivery ha crecido muchísimo desde el estallido de la pandemia pero, según los entrevistados, va a ver una caída de este crecimiento porque la gente está deseando salir y consumir de puertas para afuera. «Las ventas en el delivery quizá caigan un 20% o 30% respecto al año pasado y beneficiará al front», afirma Miguel.
Creen que CLOUDTOWN ha sido un éxito porque el Covid-19 ha acelerado lo que iba a a pasar en tres años. Para construir este grupo, aglutinan diversas marcas bajo unos criterios pero, ¿qué les mueve para sumar fuerzas con otras empresas? «Buscamos partners que tengan un camino recorrido y estructura definida pero que no tengan recursos para explotar su modelo de negocio», cuentan. De esta manera apoyan a esta marcan uniéndolo a los valores de CLOUDTOWN.
«En la operativa buscamos que el espacio de cocina estén los ingredientes para que la misma operación convergen todos. Hay un elemento con mucha tecnología detrás, cuidando la trazabilidad», dicen.
Pero de la necesidad de este crecimiento, también nace querer trasladarse al negocio de las white kitchens. Ahora han lanzado una tienda física, moviéndose de lo online a lo offline. «Nuestros locales tienen dos caras. Lo vemos como un tema de omnicanalidad, que es clave para el negocio de la restauración para tener mas cantidad de ingresos», dicen, aunque no pierden su foco principal y esencial que es lo online. «Esto va en nuestro ADN. Hemos estado metidos en el mundo del front y en el mundo del delivery y queremos estar ahí porque balancea mucho más y diversifica también. A nivel que vas a creciendo, creemos fundamental estar en ambas partes».