La hostelería española se enfrenta a un cambio significativo con la entrada en vigor del Reglamento Europeo de Envases y Residuos de Envases (PPWR), previsto para mediados de 2026. Esta normativa, en línea con el Real Decreto 1055/2022 ya vigente en España, busca reducir drásticamente los residuos plásticos y promover una economía más sostenible.
¿Qué implica esta normativa para los restaurantes y bares?
A partir de la fecha mencionada, quedará prohibido el uso de envases monodosis en establecimientos de hostelería. Esto incluye sobres individuales de azúcar, leche, mantequilla, mermeladas, salsas, así como los pequeños botes de champú y gel en hoteles. La medida pretende reducir el uso de plásticos de un solo uso, que representan el 36% de los residuos urbanos en la Unión Europea.
Requisitos y plazos
- Entrada en vigor: Mediados de 2026.
- Adaptación: Los establecimientos deberán sustituir los envases monodosis por alternativas reutilizables o recargables, como dispensadores o tarros colectivos.
- Formación: Es fundamental capacitar al personal en el manejo de estos nuevos sistemas y establecer protocolos de limpieza rigurosos para garantizar la higiene.
¿Cómo impactará en el sector?
Según estimaciones, la implementación de esta normativa podría suponer un coste adicional de 23.000 millones de euros para el sector de la hostelería y los supermercados en Europa. Los empresarios expresan preocupación por las dificultades logísticas y el aumento de los tiempos de servicio que podrían derivarse de estos cambios.
Sin embargo, a pesar de los desafíos iniciales, esta normativa ofrece varios beneficios:
- Reducción de residuos: contribuye significativamente a la disminución de residuos plásticos, alineándose con los objetivos de sostenibilidad de la UE.
- Mejora de la imagen de marca: Los consumidores valoran cada vez más las prácticas sostenibles, lo que puede traducirse en una mayor fidelización.
- Cumplimiento normativo: Adaptarse a esta normativa evitará posibles sanciones y posicionará al establecimiento como líder en responsabilidad ambiental.
La transición hacia una hostelería más sostenible es un desafío, pero también una oportunidad para innovar y fortalecer la relación con los clientes. Adaptarse a la nueva Ley de Envases no solo es una obligación legal, sino una inversión en el futuro del planeta y del propio negocio.
Si quieres anticiparte ya a este cambio y estar preparado antes de su entrada en vigor, no olvides estas cuatro claves para una transición fluida:
- Evaluar los productos afectados: Identificar todos los productos que actualmente se ofrecen en envases monodosis.
| Producto afectado | Alternativa sugerida |
|---|
| Sobres de azúcar | Azucareros o dispensadores recargables |
| Porciones de mermelada | Cuencos o tarros colectivos |
| Botes pequeños de gel de manos | Dosificadores o dispensadores fijos |
| Paquetitos de mantequilla | Envase reutilizable compartido |
2. Buscar alternativas sostenibles: Investigar proveedores que ofrezcan soluciones reutilizables o recargables.
3. Formar al personal: Capacitar al equipo en las nuevas prácticas y protocolos de higiene.
4. Comunicar los cambios a los clientes: Informar a la clientela sobre las nuevas medidas y su impacto positivo en el medio ambiente.




