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Mónica Mainero| Madrid

8 mayo 2013

Ha sido costumbre desde tiempos casi inmemoriales. En todos los mercados se han situado siempre bares o cafeterías donde tomar algún que otro tentempié, menús o platos del día. Ahora, la oferta se ha sofisticado y en algunos mercados se sitúan restaurantes con una oferta gastronómica de alto nivel.

Uno de los más destacados es Abastos 2.0 en el mercado de Santiago de Compostela, un restaurante con una única mesa que ocupa seis puestos del mercado, y donde sus responsables ofrecen una cocina de mercado no exenta de una enorme creatividad.

En Barcelona, el Cuines de Santa Caterina del Grupo Tragaluz, en el mercado de Santa Caterina, es otro ejemplo de cocina elaborada con los productos del mercado.

También en la Ciudad Condal acaba de abrir sus puertas el restaurante Pòrtic Boqueria, hallado en el mercado más famoso de la capital catalana. Ubicado en los pórticos de la emblemática plaza barcelonesa, su oferta gastronómica está basada, como no podía ser de otra manera, en producto de  primera calidad procedente del propio mercado, focalizada especialmente en la materia prima autóctona, cien por cien mediterránea.

Pòrtic Boqueria coincide en días de apertura con el propio mercado: así, el restaurante abre de lunes a sábado, desde las 8:30 a las 23:30 horas.

No es el primer establecimiento de hostelería en el mercado de la Boquería. Por ejemplo, en el mercado barcelonés está el mítico Pinotxo, un lugar celebrado por numerosos cocineros, como por ejemplo Ferran Adrià, críticos y periodistas gastronómicos y, por supuesto, por el público.

¿Te has planteado situar tu bar o restaurante en el corazón de un mercado? Además de lo atractivo del emplazamiento para el cliente, ¿qué mayor comodidad que tener a tus proveedores siempre al lado? Un local situado en un mercado puede tener una franja horaria de atención al público muy amplia con la garantía de que a todas horas hay un buen flujo de visitantes.